Historia
Alguien está sentado a la sombra hoy, porque mucho tiempo atrás alguien
plantó un árbol ahí.
Para nosotros el bosque representa la continuidad de la vida, de la naturaleza, y también de nuestra propia familia. El bosque es el lugar donde nos podemos encontrar y conversar tanto con nuestros antepasados como con nuestros descendientes, todos conectados por una naturaleza atemporal.
Pero este hilo que une generaciones es frágil, y por lo mismo lo debemos cuidar de una manera sustentable, no solo en su aspecto medioambiental, sino que también en su conexión con la fauna y la comunidad. ¿Y quién más interesado y en una mejor posición para aportar al cuidado que aquellas comunidades cercanas al bosque, que viven de él?
BOSQUE NATIVO ELNAHUE se encuentra en la precordillera de la región de Ñuble, está inserto en un tipo forestal en que predominan el roble, el raulí y el coihue, variedades que lamentablemente han sido sobreexplotadas por mucho tiempo, especialmente el raulí. Esto generó bosques abandonados, sin regeneración, con baja utilización del piso forestal y sin ninguna proyección productiva.
El plan de manejo forestal en el que estamos abocados busca renovar nuestro bosque, devolviéndole el vigor perdido. Consiste en crear ciertas fajas que permitan la entrada de luz y el crecimiento de árboles nuevos en el lugar que ocupaban los antiguos. Pero esta sustentabilidad medioambiental del bosque también pasa por la sustentabilidad económica del proyecto, por lo que comercializar los “residuos” del plan de manejo se hace fundamental.
La invitación queda abierta, y es para todos los que amamos el bosque a entablar una red de apoyo y amistad para conservar esta maravilla que la naturaleza nos presta para disfrutarla, y al mismo tiempo cuidarla para los que vendrán.